Fórmula química: C

Dureza: 10

Peso específico: 3,52

Raya: imposible de rayar

Fractura: concoidea

Exfoliación perfecta, paralela a la cara del octaedro

Sistema cúbico

Brillo Adamantino a graso

Pertenece a la familia de los elementos nativos

El nombre de diamante procede del griego además que significa invencible. La palabra adamantino se refiere al fuerte brillo de minerales con altos índices de refracción como el diamante o la cerusita. Se distingue de los demás minerales de similar semejanza por su gran dureza, su brillo adamantino y su exfoliación.

El diamante, en lo que a su composición se refiere, se trata de carbono puro, con una estructura cristalina correspondiente a un empaquetamiento cúbico compacto es el polimorfo estable a altas presiones del grafito. A bajas presiones o temperaturas, es inestable respecto al grafito. Sin embargo, ambos coexisten a temperaturas y presiones normales. Esto es debido a que la reacción de polimorfismo que reconstruye la estructura cristalina del mineral es muy lenta.

Los primeros diamantes sintéticos se obtuvieron en unos laboratorios en Suecia en el año 1953 con unas condiciones de presión y temperatura muy elevadas (2400K (2126°C) y unos 76 kilobares de presión). A raíz de estos inicios, hoy día la producción mundial de diamantes sintéticos es de unos 300 millones de kilates, 3 veces mayor aproximadamente a los kilates de los diamantes extraídos de mina.

USOS

Los pedazos de cristales de diamante se utilizan para cortar vidrio. El polvo fino se usa para pulir y triturar diamantes, a la vez que otras gemas. Para cortar roca u otro tipo de material se emplea polvo de diamante impregnado en discos de corte. Las brocas de acero están impregnadas también con diamantes, en especial la variedad criptocristalina que se llama carbonado, para fabricar las taladradoras de diamante que se emplean en los trabajos de saneo minero. Así mismo, el diamante se utiliza en el trefilado de alambres y en herramientas para rectificar las ruedas de afiliar.

Hablando ahora del diamante como gema, no hace falta recordar que es una de las gemas de más alto precio. Su valor depende de su dureza, del brillo (gracias a su alto índice de refracción), y de su fulgor, que es creado por su fuerte dispersión de la luz. Las gemas más valiosas son las incoloras o con un color blanquiazul sin manchas. El color amarillo pálido le resta mucho valor al diamante. Los colores poco comunes, como ahora el rojo, verde o azul, se aprecian mucho y llegan a tener precios muy altos.

YACIMIENTOS

Los diamantes se han hallado en lugares muy diversos pero en cantidades notables solo en determinados lugares. Normalmente, el diamante se halla en depósitos aluviales gracias a su naturaleza química inerte, a su gran dureza y a su gran peso específico. En ciertas regiones como China, Siberia o India, los diamantes se han encontrado in situ, en una roca llamada Kimberlita, nombre que se refiere a la localidad de Kimberley, en Sudáfrica. Las kimberlitas constituyen un grupo de rocas ultrabásicas potásicas ricas en materias volátiles, como el CO₂ con una variación de composiciones megacristalizadas sobre un sustrato de grano fino. Estos “megacristales” (quiere decir que destacan mucho sobre una matriz de tamaño de grano muy inferior al cristal observado) pueden ser de ilmentita, piropo, flogopita, o cromita, entre otros.

La mina de diamantes mayor y más productiva del mundo es la Premier, a 38km al este de Pretoria, en Sudáfrica. Desde que iniciaron la explotación en 1903 se han extraído 30 millones de quilates, o sea, unas 6 toneladas de diamantes. Ahí se encontró el diamante más grande del mundo, el Cullinan, conocido como Estrella del Sur, que pesaba aproximadamente 3106 quilates, unos 630 gramos.

Según unos datos de 1991, Australia lideraba a los paises productores de diamantes del mundo, seguida de Zaire, Bostwana, CIS (Comunidad de estados Independientes), Sudáfrica, Namibia, Sudamérica.